Domingo 29 de Agosto. Penang.

Penang es una ciudad colonial, con un centro de casas antiguas muy grande, aunque no tan cuidado como Malaka, pero este es mas autentico, y sin duda merece mas la pena si se quiere lo autentico. Hay mas perros que en KL, las alcantarillas estan al descubierto, hay conciertos por las calles por la noche donde los locales pueden ver un poco de carne fresca ya que solo vi hombres, lo tipico de ver no es muy expectacular, tiene una zona costare interesante, pero nada de playas, al menos en Gorstaun, al sur de la isla hay playas, y al norte una mezquita flotante. Nosotros nos levantamos justo a la hora para ir a comer, picoteamos algo de algun puesto, y el ojaldre con pollo al curry estaba fantastico. Comimos un arroz con verduras por 1 euro. La fruta valia nada, unos 30 cent., y un vaso de leche de soja dulce 25cent, cuando en españa es bastante
caro, aunque empieza a bajar gracias a mercadona.
Llegamos hasta el edificio mas famoso de Penang, uno redondo y muy alto, no se la funcion que tiene. Aqui toco el turno de los moles, tras el amago de entrar en un satrbaks, terminamos en un pizza hut, 10 euros pizza familiar y un litro de pepsi, tipico. De aqui a dar un paseo por la ciudad, viendo la mezcla de iglesias, templos budistas, y mezquitas. Por supuesto, las mezquitas las mas ruidosas, llamando a la horacion unas 5 veces al dia. Al estar un pelin artos de templos no prestamos mucho caso a lo que vimos, aunque imaginamos que era bonito. La hora de la cena se acercaba y estabamos espectantes pensando si nos entraria hambre tras comernos una pizza familiar.

El hambre vino y decidimos ir al mercado nocturno que esta cerca de la costa en el norte, a unos 20min en el bus 101 o 103. No sabiamos si merecia la pena el desplazamiento, y la vuelta no la teniamos asegurada con bus, asi que temimos por nuestros ahorros, que constaban de 10 euros para volver a casa y cenar. En principio llegaba, pero no para un taxi, y la idea de sacar de un cajero no nos gustaba por la comision. Conseguimos ajustarnos, ostras fritas, y dos postres, uno como pasta con chocolate y otro helado con judias. La vuelta sin problemas, una hamburguesa de 50cent. al tio de nuestra calle, y un durion por 4 euros, el olor es a mierda, a basura, y el sabor es curioso, la testura es nata, al rato de comer algo que se parece a muslo de pollo cansa, silvia no aguantaba el olor y a dormir al Crystal. Compramos el billete a Krabi por 12 euros, imposible encontrar nada mas barato, estan todos compinchados.

No hay comentarios:

Publicar un comentario